Localidade

Ponta Delgada empezó siendo un pequeño pueblo de pescadores atraídos por sus seguras ensenadas, pero enseguida empezó a cobrar importancia como principal puerto de la isla de São Miguel.

La ciudad creció y vio aparecer durante los siglos XVII y XVIII los conventos, iglesias y casas señoriales que todavía hoy definen su centro histórico.

Ponta Delgada es hoy una ciudad cosmopolita, volcada al exterior y con una vida económica y cultural muy activa. La gran avenida que acompaña al puerto y al mar —y define el perfil de la ciudad— es la expresión de su dinamismo y de su adaptación a los nuevos tiempos, a la vez que brinda acceso a toda la ciudad.

Con una historia de más de cinco siglos y preciosos testimonios del pasado, Ponta Delgada es una ciudad muy diversa en la que la tradición convive con la modernidad, y el cosmopolitismo, con la tranquilidad de la saludable vida en las Azores.

No se pierda en Ponta Delgada la iglesia parroquial de San Sebastián, la iglesia de San Pedro, la iglesia de San José, el convento y la capilla de Nuestra Señora de la Esperanza, el Tesoro del Señor Santo Cristo de los Milagros, el Museo Carlos Machado, las Puertas de la Ciudad ni el jardín José do Canto.