Venga a Barrancos a descubrir un secreto bien guardado – el Parque de Naturaleza de Noudar. Puede elegir entre tres opciones, a pié, en bicicleta o en un vehículo ecológico, tres formas de disfrutar de este ambiente protegido. 

Antes de iniciar su paseo, visite el Monte da Coitadinha. Aquí puede obtener informaciones para organizar su visita, o también, alquilar algún equipamiento que haya olvidado, como los prismáticos o la btt. Son evidentes las señales del uso agrícola de esta finca que conserva la antigua era, un excelente lugar para admirar el paisaje de la montanera alentejano.

Siga los senderos y llene sus pulmones de aire puro, mientras intenta distinguir los aromas que emanan de los campos. Para que no se confunda, llévese la guía digital, un precioso auxilio para identificar las plantas que irá encontrando.

Tanta riqueza vegetal en un ambiente tranquilo atrae a un gran número de aves, como los buitres negros que guardan el castillo de Noudar, mientras observan atentamente los alrededores. Este es el ave más imponente del Parque y cuando levanta vuelo, la envergadura de sus alas planas forma una línea que alcanza casi tres metros. La fortaleza también es uno de las atalayas preferidas para las cigüeñas negras, que entre marzo y agosto se avistan en otros puntos altos, como las fragas ribereñas o los postes eléctricos. En inverno llegan las grullas que se dejan oír sobre todo de madrugada y al anochecer. Con suerte, conseguirá observar las “danzas” de estas aves elegantes, que en algunos países son consideradas símbolos de felicidad y longevidad.

La Ribeira da Múrtega marca el límite sur del Parque. Hoy corre más despacio, pero la fuerza de sus aguas ha movido durante siglos los molinos que por aquí se encuentran y constituyen el origen del ingrediente esencial de la gastronomía alentejana, el pan. Pruebe a saborearlo con queso regional o con miel de romero en una merienda, teniendo como música de fondo el canto melodioso del petirrojo.

Otro sonido que a veces rompe el silencio es el bramido de los venados durante los rituales de apareamiento. O, también, puede oír el ruido de los jabalíes removiendo el follaje, para enseñar a sus crías donde se encuentran los mejores alimentos. Es el fervor constante de la Naturaleza. Descúbralo en Noudar.