Monumentos

Genuina obra barroca de Nicolau Nasoni, es un símbolo de la ciudad de Oporto.

La iglesia de los Clérigos es una genuina obra barroca de mediados del siglo XVIII, concebida por Nicolau Nasoni, arquitecto de origen italiano que dejó su impronta en muchos monumentos de Porto y de la región norte de Portugal.Por su deseo, Nasoni está sepultado en una pequeña capilla, de puerta enrejada, al nivel del último rellano de la doble escalinata de balaustradas.

Toda la parte delantera del templo muestra un decorado barroco muy interesante y bello, en los cimborrios y pináculos, que vale la pena apreciar en detalle. El interior, de nave única, en granito y mármol, revestido con tallas barrocas, revela igualmente la maestría de su arquitecto. En la capilla mayor sobresale un retablo policromado de Manuel Porto.

Sin embargo, el elemento más sobresaliente de este conjunto es la Torre construida en granito, que se alza en la cumbre occidental del cuerpo de la iglesia. Inconfundible símbolo de la ciudad y extremadamente esbelta en sus 75m de altura, la torre se levanta en impulsos armónicos que culminan en una coronación donde, la decoración barroca es de una delicadeza y levedad notables, desde el reloj a la esfera que lo culmina.

En 1917, la Torre de los Clérigos fue escalada, ante una enorme muchedumbre, por dos acróbatas españoles de Puertollano, padre e hijo, proeza que, viendo la Torre, parece inalcanzable.

Una escalera interior de 225 peldaños, permite el acceso a la parte más alta. Para quienes no quieran repetir la proeza de los españoles, es la mejor forma de admirar, sin riesgo alguno, una de las más bellas panorámicas de Oporto.